Mármol y granito son dos de los tipos de piedras naturales más empleados en construcción y decoración. Aunque pueden presentar bastantes similitudes, también tienen varias diferencias que es importante conocer antes de decantarse por uno o por otro. ¿Tienes dudas entre elegir mármol o granito? ¡Aquí las resolvemos!
Mármol o granito: diferencias a tener en cuenta
Aunque tanto el uso de mármol como el de granito está muy extendido en el sector de la construcción y del interiorismo, es importante saber que no siempre sirven para cubrir los mismos objetivos y necesidades. Mármol y granito son diferentes y es clave conocer en qué difieren para poder tomar la mejor decisión para tu proyecto.
Durabilidad y dureza
Por norma general, el granito es más duro y fuerte que el mármol. Gracias a sus propiedades técnicas, el granito es un material muy duradero, resistente al calor y a los posibles daños o arañazos que pueda sufrir. Por eso, es tan frecuente verlo en encimeras de cocina o en baños.
Por otro lado, el granito es capaz de mantener su brillo natural durante más tiempo que el mármol, que debe someterse a tratamientos de pulido de forma más frecuente para mantenerse en perfecto estado.
Estética y apariencia
El diseño y la apariencia son dos de las grandes ventajas del mármol y del granito. Ambos materiales son piedras naturales totalmente espectaculares, lo que hace que cada pieza sea completamente única, especial y que no haya otra igual.
La principal diferencia entre mármol y granito, a nivel estético, radica en el estilo que estés buscando para tu hogar. El granito presenta pequeñas piedrecitas (como feldespato, mica o anfíbol) incrustadas que le dan un aspecto más “pecoso”. Por otro lado, el mármol es mucho más limpio y liso con vetas largas y regulares que dibujan líneas onduladas sobre la piedra. Además, el mármol ofrece una paleta de colores más variada.
Usos y aplicaciones
Ambos son materiales muy versátiles y muy empleados en interiorismo, gracias sobre todo, a sus excelentes propiedades mecánicas.
Aún así, a priori, podemos decir que el mármol es un producto que se utiliza, principalmente, como revestimiento y pavimento. En cambio, el granito se emplea mayoritariamente en la fabricación de encimeras de cocina y baños. De todas formas, tampoco es extraño ver el granito en suelos por donde transita mucha gente. El mármol, en cambio, se reserva para áreas menos concurridas.
Lo que está claro es que, una vez aplicados, tanto el mármol como el granito aportan un toque extra de elegancia a cualquier estancia. Aunque es innegable que el mármol siempre ofrece un aire más sofisticado y exclusivo que va perfecto tanto con diseños clásicos como vanguardistas.
Mantenimiento
Saber cómo limpiar el mármol o el granito es un punto clave a la hora de optar por uno u otro material. Las buenas noticias son que los dos tienen un mantenimiento bastante sencillo aunque, como son piedras naturales, hay que tener cuidado con el uso de químicos o productos que puedan resultar agresivos y dañen las superficies. Esto es especialmente relevante en el caso del mármol que, al tratarse de un material más delicado, puede llegar a perder su brillo natural. Para evitarlo, la mejor opción es utilizar productos neutros o específicos.
Por otra parte, para prevenir manchas y marcas, también será necesario realizar un sellado. Normalmente, el mármol debe sellarse con más frecuencia. Sin embargo, el granito puede sellarse cada dos años, aunque esto puede variar en función de la regularidad con la que limpies la piedra.
Precio
En líneas generales, el granito suele ser más económico que el mármol. Pero todo dependerá de la calidad de la piedra, el estilo de cada pieza y lo difícil que sea el proceso de instalación.
Entonces… ¿es mejor mármol o granito?
La respuesta es que depende. Ambos materiales son piedras naturales y tienen sus propias cualidades y propiedades. Por eso, la elección dependerá del tipo de proyecto que estés buscando, de la estética que quieras conseguir y de tu presupuesto.
Si quieres un diseño elegante y sofisticado y estás dispuesto a dedicar tiempo a su mantenimiento regular, entonces apuesta por el mármol. Si prefieres una piedra más duradera, más resistente a los daños y que se desgaste menos, el granito es tu opción.