A lo largo de los años se ha hablado mucho sobre la versatilidad del mármol tanto en el ámbito de la construcción como en el de la decoración o el de la escultura. Y no es para menos si tenemos en cuenta que hablamos de uno de los materiales con mayor diversidad de colores. Procedente de la naturaleza, esta lo ha moldeado al albur de las condiciones climatológicas y ha hecho de él uno de los elementos con más carácter del planeta.
Debes saber que se trata de un mineral metamórfico, es decir, que puede darse en una gran variedad de colores dependiendo de los caprichos del clima. Mármoles azules, rojos, negros, cremas, grises, amarillos, verdes, unidos a colores homogéneos y también dispares.
La variedad de combinaciones de esta piedra solo puede encontrar límites en tu imaginación y hasta donde llegue tu creatividad. Es, por tanto, gracias a su versatilidad uno de los minerales más utilizados en el mundo.
Nos encontramos ante una roca homogénea y calcárea que se cristaliza cuando se la somete a alta presión y temperatura. El mármol está compuesto, en gran medida, de carbonato cálcico. El resto de su composición básica es la que define la amalgama de color de la piedra y de su fisonomía.
¿Cuáles son los principales usos del mármol?
Esta pregunta puede tener tantas respuestas como utilidades se le pueden dar a la roca. Entre sus principales usos se encuentra recubrir paredes a modo decorativo, tanto para interiores como para exteriores.
Lo encontraremos en pavimentos interiores y exteriores, decorando fachadas, en las escaleras de portales y viviendas. Y hogares que nos lo mostrarán en sus salones, cocinas, aseos y dormitorios.
En la decoración
El mármol es una de las piedras más usadas por interioristas y arquitectos cuando se busca dar protagonismo a un espacio. Su tono se mantiene invariable con el tiempo, sobre todo si lo utilizas en interior. Es un material muy gustoso y agradecido, ya que para recuperar el brillo perdido, solo requiere un buen abrillantado. De este modo, resplandecerá como el primer día. Lo verás aplicado a encimeras, pavimentos, fachadas y paredes de interior.
En la construcción
Si nos centramos en la construcción, verás que el mármol forma parte de edificaciones médicas, como clínicas y hospitales. En estos espacios, el trasiego de personas es elevado y se requiere higiene y limpieza. Por ello, su uso es perfecto en paredes.
Asimismo, es una roca muy común también en lugares donde el diseño estético juega un gran papel. Las salas de convenciones, las de reuniones o los palacios de congresos y de arte son buenos ejemplos. El mármol dota a estos espacios de un alto grado de sofisticación y elegancia. Tanto en la antigua Grecia como en el Imperio romano suponía un símbolo de poder.
En la escultura
Pero no queda ahí solo su utilización. Son tan polifacéticos su textura y su color que por eso encaja a la perfección en el mundo de la escultura. De hecho, es una de las piedras más usadas en este sector.
El propio Miguel Ángel lo usaba. Extraído de las canteras de Carrara, en la Toscana, es la materia prima con la que el artista renacentista realizó sus maravillosas obras, como el David.
Si te remontas siglos atrás en el tiempo, descubrirás que otros grandes escultores se sirvieron de esta roca metamórfica para crear piezas espectaculares. Por ejemplo, la Afrodita de Cireme, hallada en territorio libio a comienzos del siglo XIX, que está datada entre el año 100 a. C. y el 400 d. C.
Como nota anecdótica, destacaremos que las siete maravillas del mundo están construidas en gran medida con este material. El Taj Mahal cuenta con grandes cantidades de mármol blanco, calizas y ornamentos con piedras preciosas. Por su parte, el Coliseo de Roma está recubierto en mármol. También la estatua del Cristo Redentor, en Río de Janeiro, o la Gran Muralla China.
Pero ¿qué ventajas tiene el mármol con relación al resto de materiales?
Por una parte, es un material altamente resistente . Como te hemos dicho antes, se trata de una roca metamórfica formada por piedra caliza, material duro y homogéneo. Además, cuenta con la particularidad de que, al ser una roca natural, sus vetas son distintas y cada pieza es única.
A eso debes sumarle que es un elemento que envejece bien en comparación con otros materiales. Además, su duración es muy superior, pues resiste el calor y los impactos y funciona bien en decoración gracias a su amplitud de variedades.
En conclusión, la versatilidad del mármol permite una gran amplitud de posibilidades. Podemos emplearlo en la decoración, gracias a su alto nivel de brillo natural, en construcción, por su durabilidad y resistencia, y en la escultura, por su polivalencia. Por último, no olvides que su uso es extensible tanto a interiores como a exteriores.